jueves, 20 de noviembre de 2014

Dos tontos todavía más tontos o cómo cargarse una película mediante el doblaje

Después de veinte años, creo que todos los que formamos la generación de los 80 y 90 ansiábamos saber qué fue del mágico dúo de Lloyd y Harry. Una pareja que se ganó nuestro cariño y nuestro corazón en Dos tontos muy tontos allá por el año 1995. 


En la primera entrega, la película giraba en torno a un viaje de miles de kilómetros desde Providence hasta la localidad montañosa de Aspen. Todo este largo viaje se debe a Mary "Samsonite", la chica de la que se enamora Lloyd cuando la va a llevar al aeropuerto y ésta deja una maleta en el aeropuerto. Lloyd, muy caballeroso él, decide llevarle la maleta en persona hasta Aspen, sin saber el riesgo que corren él y su compañero Harry, ya que la maleta contiene el dinero del rescate de Bobby, el marido de Mary.  Por supuesto, en todo el camino vivirían miles de aventuras y peripecias, enfrentamientos con camioneros, bromas, esquinazos a la policía, muerte a un matón... todo sin quererlo claro. 

Dos tontos todavía más tontos, cuenta con una trama bastante parecida a la primera, como no podía ser de otra manera. Dos amigos que se comen la carretera en busca de una chica de la que Lloyd se ha quedado prendado. Dejan al "muerto" a Billy, el niño ciego al que le vendieron hace 20 años su periquito muerto. Y conducen junto a un hombre que quiere matarles aunque ellos no lo saben y sin quererlo, se deshacen de él de manera muy oportuna. Lloyd sueña despierto con las cosas que haría con la chica a la que buscan. Finalmente, consiguen llegar hasta la localidad de la chica, se cuelan en un acto muy importante en el que no están invitados y encuentran a la mujer que andaban buscando. Pero la desilusión les llega cuando la chica no corresponde a ninguno de los dos. 

La película cuenta con una gran carga cómica muy digna de los hermanos Farrely y guiños hacia su precuela e incluso un guiño a Breaking Bad

Como se ha dicho muchas veces "las segundas partes nunca fueron buenas", esta puede ser una de esas veces. La película está bien, obviamente superar a la primera es un trabajo muy difícil, imposible diría yo y con esta secuela no se ha conseguido llegar al nivel de la primera. Pero a una que ha crecido con las películas y el humor de Jim Carrey, le hace ilusión volver a ver a Lloyd y Harry de vuelta a las andadas. 

Sin duda, lo peor de mi experiencia en el cine con esta película ha sido el doblaje. Es sabido que el doblaje en España es de muy buena calidad y casi siempre se ha hecho muy buen trabajo, ya que tenemos unos actores de doblaje muy buenos. De hecho, seguro que no soy la única que cuando piensa en Jim Carrey asocia su persona con la voz en español de Luis Posada, que es quien ha prestado su voz al actor en todas sus películas desde 1994 con precisamente, Dos tontos muy tontos. O por ejemplo, cuando uno piensa en Samuel L. Jackson, reconoce la voz de Miguel Ángel Jenner, que es su doblador habitual.
De hecho, hace poco vi un documental muy bueno, Voces en imágenes, en el que muchos de los actores de doblaje de España eran entrevistados. Se les ponía cara por fin a todas esas voces que habíamos visto en la gran pantalla miles de veces. Cuando salió Luis Posada, me alegré enormemente de ver por fin el rostro que me había regalado miles de momentos de risa y diversión interpretando a mi actor favorito. Había un actor de doblaje en concreto que decía que si veías una película y al terminarla no te habías dado cuenta del doblaje, es que habían hecho un buen trabajo. Sé que el sector del doblaje está pasando por un mal momento, pero siento mucho decir, que con la nueva película de los hermanos Farrely no me ha parecido un buen trabajo hecho. 

Cuando vi el tráiler de Dos tontos todavía más tontos, me llevé una gran desilusión al ver que habían sustituido a Luis Posada para doblar la voz de Jim Carrey. Pensé esperanzada que quizá sería sólo para el tráiler y que en la película sí que le doblaría él. Mi desilusión me abofeteó en la primera escena de la película y se extendió por completo en el resto de ella. Veinte años escuchando a Jim Carrey en español con la voz de Luis Posada y en la película más esperada del otoño van y lo sustituyen... No sé a qué se debe el cambio pero creo que no soy la única persona a la que el doblaje le ha fastidiado la película. Escuchar a Jeff Daniels con la voz de Billy Crystal o a Kathleen Turner con la vocecita de Catherine Keener tampoco ha ayudado nada. Quizá sea yo, una fan del doblaje español y que está acostumbrada a la voz de cada uno para cada personaje. Pero tengo que decir que la secuela de Dos tontos muy tontos ha perdido muchísimos puntos debido al doblaje inadecuado que se ha hecho de ella. 
Sin duda volveré a verla pero en versión original para volver a darle una segunda oportunidad. Mientras, siempre nos quedará la primera e inigualable de 1994. 

miércoles, 29 de octubre de 2014

Gone Girl de David Fincher

Está claro que David Fincher es un maestro del mundo audiovisual, eso no es nada nuevo. Cuenta con muchos títulos a sus espaldas que lo demuestran, La Red Social, o El Club de la Lucha sin ir más lejos.
Pero debo decir aún a riesgo de que muchos me apaleéis, que David Fincher está un poco sobrevalorado. Y con Gone Girl se evidencia. Los ciegos amantes de este realizador, que son muchos me querréis matar ahora mismo. Pero como bien se dice, para gusto los colores. Y en mi caso esta película aunque me ha gustado, no me parece una obra maestra.


Aunque no me parezca una gran película no significa que no tenga grandes matices, que los tiene. Por ejemplo, el tipo de narración de la historia. Esa combinación de versiones, tanto la de Nicke Dunne (Ben Affleck) con la de Amy Dunne (Rosamund Pike), ambas necesarias pero muy bien compaginadas. Mientras Nick está viviendo el presente, lo que está ocurriendo desde que Amy desaparece, ella narra a través de flash backs al pasado, cómo se conocieron, cómo se enamoraron y luego, cómo se han ido desenamorando. Un retrato muy verídico de una relación.

Aunque la narración de Amy va más allá y ella misma cuenta su desaparición... Y ahí es donde empiezan varios errores que a mi juicio, restan credibilidad para ese final.

¡ALERTA SPOILERS!

En general, en la segunda mitad de la película, cuando el público ya descubre dónde está el personaje de Amy y su retorcido plan, van surgiendo detalles y cabos sueltos que no permiten el tipo de final de la película. 
Primero, cuando los dos vecinos que tenía en el camping descubren que lleva un montón de dinero encima y aun así ella no se va del sitio, sino que se queda aún a riesgo de que le roben. Porque se sobre entiende que el lugar donde se está alojando es para personas con pocos recursos financieros.
Siendo ella tan meticulosa y planificadora como lo es, no se entiende que se deje robar de esa manera. Y más aún, que se escapen inmunes...
Damos un salto y Amy ha vuelto a su casa (no tiene más remedio), y es cuando salen a la luz todos esos cabos sueltos de los que os hablo. Además son cabos sueltos que la policía resalta en la rueda de preguntas que ella hace a su vuelta.
1. ¿Qué hacías con la porra de las marionetas ? Que es la que le falta en el regalo de Nick, que casualmente está empaquetado y guardado en la leñera.

2. Esta no la resalta la policía, sino es una cuestión propia. Si supuestamente te golpearon con la porra para que perdieras toda esa sangre de la cocina, ¿cómo es que no hay marcas de eso en el cuerpo?. Porque las heridas de ese tipo se mantendrían durante bastante tiempo.
3. El siguiente cabo suelto la descubre el propio Ben Affleck "Si estaba secuestrada y atada, ¿cómo es que tenía un cúter?" A lo que el policía le responde "¿No se alegra de que su mujer esté de vuelta en casa?"

Bien, quizá estos cabos sueltos los dejase David Fincher a propósito con algún objetivo, quizá para demostrar que la policía no siempre es tan eficaz como parece. Que no siempre ganan los buenos. Quién sabe.

Como conclusión quisiera resaltar varios aspectos, el primero que esta película, aunque no sea su objetivo, demuestra el grandioso poder que tienen los medios de comunicación. Pueden convertirte en el asesino más odiado de todo el país y esos mismos medios, te pueden coronar después como el mejor marido del mundo. Y la gente se lo creerá.

Y para terminar, pero no menos importante , de hecho , para mí ha sido lo mejor: la magnífica interpretación de Rosamund Pike. Esta actriz ha demostrado ser mucho más que una carita dulce y linda que era en Orgullo & Prejuicio, y sorprender al público con un talento artístico impresionante.
Puede transmitirte la ternura y simpatía que ofrece su sonrisa y minutos después puede hacer que te cagues de miedo. Magnífica.

Lo peor, para mí ya lo he dicho, es el final. Es que no hay por dónde cogerlo. Aunque reconozco que es algo distinto, por primera vez, no gana el bueno y eso también es digno de admirar, independientemente de que no me guste porque no me parece creíble.

En definitiva, una película que está bastante bien para pasar el rato pero no para verla una segunda vez.

lunes, 15 de septiembre de 2014

Crítica constructiva de Breaking Bad

A estas alturas debe de haber poca gente que no haya visto o no sepa qué serie es Breaking Bad. Un fenómeno televisivo que se ha galardonado con más de doce premios desde sus comienzos en 2008 y que arrasó en la edición de los Emmys de este año una vez más. 

Para aquellos que aún no están familiarizados con la serie que más ha revolucionado a los espectadores desde Lost, os contaré un poco de qué va la cosa. Walter White, interpretado por Bryan Cranston (sí, el padre de Malcom) es un profesor de instituto de química al que le acaban de diagnosticar cáncer de pulmón. Viendo que no sabe si vivirá mucho más, decide junto con Jesse Pinkman (Aaron Paul) aplicar sus conocimientos de química y fabricar metanfetamina y ganar dinero que dejar a su familia tras su muerte. Obviamente no será un camino de rosas, tendrá grandes problemas para ocultar a su mujer embarazada Skyler y a su hijo Walter Junior con deficiencia mental lo que hace en sus tiempos libres. Por no hablar de que la hermana de Skyler, Marie y su marido Hank, muy unidos a ellos. Ah y Hank es un agente de la DEA (Drug Enforcement Administration), es decir,  la Administración para el Control de Drogas. ¡Qué bien!
 
Después de haberme visto la serie entera en dos semanas, está claro que me ha gustado. Vince Gillian ha creado una representación genuina del mundo del narcotráfico, sabiéndolo dotar con toques humorísticos y de drama que te hacen engancharte y que quieras ver un capítulo tras otro.

La evolución de los personajes a medida que avanza la serie es magnífica, muy bien trabajada y es una de las cualidades que hacen que la serie sea tan completa. Al haberla vista seguida de forma continua el resultado de la evolución progresiva de los personajes es algo que no te deja indiferente. Sobre todo cuando estás en la quinta temporada y ves que el Jesse de ahora no es el mismo que el Jesse de la primera temporada. Esto se va a ver reflejado en los símbolos que los guionistas dejan ver. Por ejemplo, la ropa de Jesse, que no es la misma al principio que al final, cambia cuando surgen hechos que le llevan a la madurez personal.
Otro ejemplo de la simbología para definir la evolución de los personajes es el pelo de Jesse y de Walter. Al principio los dos tienen pelo en la cabeza, son personas que están en la antesala del narcotráfico a gran escala. Cuando llegan a la cúspide de las drogas tienen las cabezas rapadas. Y cuando se acerca el final, vuelven a tener cabello en la cabeza.



Walter es un personaje que también da un gran giro, pasa de ser el típico hombre enclenque que nunca ha corrido ningún riesgo ni se ha vuelto violento con nadie a pesar de que motivos no le han faltado. Una persona que no mataría una mosca y con un gran corazón, que hace todo lo que hace por su familia. Y acaba siendo un personaje manipulador, sombrío, asesino, calculador y sobre todo ambicioso.

Hay una cosa que me ha llamado la atención de esta serie y es la escasa presencia femenina que hay. De personajes fijos están Skyler y Marie, dos mujeres frente a Walter, Jesse, Hank y Walter Junior. Más del doble sin contar con la cantidad de personajes secundarios masculinos que vendrán, Saul Goodman, Steve Gómez, Mike, Ted Beneke, Gus Fring, Tuco, etc…
Por supuesto también saldrán personajes femeninos secundarios, Jane, Andrea y Lydia. Sí, otra vez ganan los hombres.

Sé que es una serie con un fuerte carácter masculino y que seguramente la mayoría de los espectadores que hayan visto la serie y sean fan serán hombres. Pero no es eso lo que me preocupa más, sino la concepción de la mujer que se le da. Están transmitiendo que todas son mujeres que son un incordio, son mujeres pesadas como un grano en el culo.Y cuando las ves te da dolor de cabeza.  Por lo menos las que salen en la serie. Pensad en cada una de ellas. Skyler, y su puterío, Marie y lo pesada que es la jodía, Jane y su maldad manipuladora, Andrea, bueno Andrea se salva un poco porque tampoco hace mucho, y Lydia sí, la neurótica, y loca.
Además quitando a Marie, Lydia y Skyler, son mujeres mantenidas, mujeres que no trabajan o apenas trabajan. De hecho, una de las razones que le dan a Walter White para que fabrique metanfetamina es que “Él es el hombre, el es el que sustenta a la familia
De este apartado podría hablar largo y tendido…

En conclusión saco que es una serie muy buena (dejando de lado el tema de las mujeres) con un gran cuidado de detalles simbólicos. Y que muchas veces ves venir lo que viene a continuación, pero sigue dejándote boca abierta cada vez que se acaba un capítulo.
Y sobre todo, destaco el mensaje que la serie quiere transmitir: el dinero no da la felicidad. Esto se ve perfectamente en Walter, cómo al principio a pesar de que le costaba llegar a fin de mes pero contaba con el amor y apoyo de su familia y cómo pasa a estar solo, con millones de dinero pero sin nadie que se preocupe por él ni nadie que quiera estar con él. De hecho, le paga a uno 10.000 dólares por que se quede a hablar con él una hora. Pierde incluso la amistad que tenía con Jesse

Y los protagonistas...Aaron Paul es un puto genio de la actuación. Esa facilidad que tiene para llorar  de angustia y para demostrar que Jesse es algo más que un yonki que sólo dice "bitch"es fascinante. Bueno y Bryan Cranston también, yo hasta ver la serie para mí era el torpe padre de Malcom y verlo como Heisenberg no hace más que probar que tiene un gran talento, sólo que no hemos tenido la oportunidad hasta ahora de verlo. Como ocurre con muchos actores tristemente. 

viernes, 7 de febrero de 2014

La gran estafa americana

Quizá el público no sepa hasta qué punto es adecuado el título de la película de David O. Russell, con 7 nominaciones a los Oscar es de las favoritas para los premios. Hermana de la que llevó el director el año pasado a la gala, El lado bueno de las cosas.
En la gran estafa americana un agente del FBI intenta a través de unos estafadores capturar a otros de su calaña, siendo su ambición cada vez mayor y la caída al precipicio si fallan también mayor. Como al agente del FBI, la película sufre una caída al vacío monumental. Ambientada en los años 70 y con una temática sobre gente que estafa a otras personas para quedarse con su dinero hace que se vengan a la cabeza similitudes… Sí, El lobo de Wal Street que se estrenó una semana antes, dirigida por el veterano Martin Scorsese y protagonizada por Leonardo Di Caprio.

Si la del Lobo fue una muestra de la magnificicencia de lo que puede ocurrir cuando juntas a un director que es Scorsese, un actor como Di Caprio y una historia como la de Jordan Belfort y sales del cine queriendo volver a entrar a verla...No te ocurrirá lo mismo con la de La gran estafa americana. 

Lejos de estar a la altura del film de Scorsese, no es comprensible por qué la película de David O. Russell es de las favoritas a los premios Oscar y ha sido nominada en tantas ocasiones en otros premios de la industria.
La esencia que la película tiene recae básicamente en Jennifer Lawrence, la niña mimada de Hollywood, pero con razón, es lo único salvable de dos horas sobre estafadores y relaciones de amor-odio entre Christian Bale y Amy Adams, con Bradley Cooper con rulos pequeñitos cual perrito faldero detrás de ella.  
Bradley Cooper con rulos, perfecto para bajarte la líbido

Por no hablar del argumento tan simple y mal vendido que tiene, algo que ya le pasó con El lado bueno de las cosas, aunque ésa por lo menos sirvió para que Lawrence se llevara a casa la estatuilla del Oscar por salvar una vez más, una película sosa de Russell.
Y es que la intención es buena pero cuando sales del cine sales con una sensación de vacío, de haber perdido dos magníficas horas de tu vida que no volverás a recuperar por una película en la que habías puesto grandes expectativas, buscando la prueba de por qué merece llegar a los Oscar.
David O. Russell no sólo ha estafado al FBI , también ha estafado a todo aquel que haya pagado y perdido su dinero y tiempo por ver su fruto de una mala indigestión.

Figuro un nuevo Woody Allen para los próximos años, fabricando películas en masa con actores que no merecen la pena perder su tiempo y trabajo con ellos y manchados sus nombres al estar en relación con una película insulsa.